En Biosalud Day Hospital somos especialistas en el tratamiento de la fibromialgia y del Síndrome de la Fatiga crónica y en este artículo os vamos a explicar los síntomas más habituales de estas enfermedades y las diferencias entre ambos trastornos.
La fibromialgia se caracteriza por una serie de dolores difusos a nivel musculoesqueléticos, aunque a veces es un dolor generalizado. La rigidez prominente afecta, por otro lado, a tres partes anatómicas concretas, como mínimo, y durante un lapso de tiempo de tres meses. Este dolor es, muchas veces, intenso, pero a la vez los pacientes no pueden explicarlo con palabras. Las épocas frías, el ejercicio físico de alta exigencia y el estrés empeoran la situación de los fibromiálgicos. Todo ello desemboca en insomnio y alteraciones del sueño, y todo ello se traduce en un menor descanso. Despertarse por la noche y cortar las fases del sueño impide a nuestro organismo recuperarse durante las horas nocturnas.
El síntoma del síndrome de fatiga crónica es una especie de cansancio persistente, tan persistente que continúa presente después del reposo y que, en consecuencia, limita los movimientos del paciente y condiciona su vida. La actividad física o intelectual (estudiar mucho en una época de exámenes) empeoran gravemente los síntomas.
A menudo el cansancio viene acompañado de sensación de pesadez en las extremidades inferiores y superiores, cefaleas o fiebre baja, irritación en la zona de la garganta, tensión alta o problemas para reflexionar y pensar, dificultades para memorizar, depresión y otros trastornos en el ámbito del sueño.
La sintomatología es similar y a veces se pueden llegar a confundir si no se realiza el diagnóstico apropiado. Por norma general puede decirse que cuando el cansancio viene acompañado de los dolores de la fibromialgia, se convierte en un síndrome de fatiga crónica.
La enfermedad de Lyme: la gran imitadora según los expertos
No podemos terminar este artículo sin añadir que alrededor del 80 por ciento de las fibromialgias son, en realidad, una enfermedad de Lyme, que en el sector médico ha sido bautizada como la gran imitadora. Es importante no confundir ambas enfermedades porque los tratamientos son diferentes. Además, la enfermedad de Lyme tiene tres fases: la temprana y localizada, la fase diseminada y la fase tardía, y dependiendo de en el punto en el que nos encontremos, se deberá afrontar una terapia u otra. Una confusión con una fibromialgia puede provocar que el Lyme sea descubierto con una mayor demora, y entonces se haya agravado, algo que se hubiera evitado con una diagnosis temprana.
En Biosalud Day Hospital somos especialistas en diagnosticar tanto la enfermedad de Lyme como el Síndrome de la fatiga crónica y la fibromialgia. A un paciente que sospecha que padece alguna de estas enfermedades, si sufre alguno de los síntomas descritos líneas arriba o si ha sufrido la picadura de una garrapata, le recomendamos visitarnos en la clínica Biosalud, en donde analizaremos su caso y le recomendaremos el tratamiento médico – farmacológico a seguir.