El mundo en el que vivimos depende en gran medida de la tecnología y, por lo tanto, de los campos electromagnéticos. Pero al igual que tienen aspectos positivos, también tienen negativos como por ejemplo las enfermedades que producen. La más severa de estas dolencias es la electrosensibilidad.

Los pacientes afectados por esta enfermedad sufren distintos síntomas cuando están cerca de un campo electromagnético de los que tanto abundan hoy en día. Estos síntomas van desde el dolor de cabeza, de garganta o el nerviosismo. Eso por no hablar de las personas que tienen algún implante metálico dentro de su cuerpo que actúa como antena. Pero los efectos de esta enfermedad son mitigables.

Lo primero que debemos hacer es limitar en nuestras vidas esos campos electromagnéticos. Acciones tan sencillas como cambiar la conexión wifi por un internet por cable o disminuir el uso que hacemos del teléfono móvil puede hacer que la calidad de vida de las personas con electrosensibilidad aumente.

Desde Biosalud creemos que muchas enfermedades se pueden solucionar mediante la aplicación de una dieta específica para cada persona en función de su ADN y la electrosensibilidad es una de ellas. Alimentos como las nueces, la avena o los plátanos harán que, gracias a sus componentes, los afectados por electrosensibilidad vean limitados los efectos de esta dolencia. También son beneficiosos los alimentos que contienen ácidos grasos omega-3. Por otro lado, será necesario eliminar el efecto que determinados metales tienen en nuestro organismo con ajo y cilantro por poner algunos ejemplos.