La protección interna es tan importante como la protección externa frente a las infecciones. Los suplementos alimenticios nos pueden ayudar a reforzar el sistema inmune y prevenir enfermedades.

En pleno proceso de desescalada debemos continuar contemplando todas las medidas de protección, especialmente el lavado de manos y la distancia o protección frente a las gotitas de saliva que pueden contener el virus.

Sin embargo hay algo más que podemos hacer, y es reforzar la propia barrera protectora de nuestro organismo, el sistema inmunitario. Existen numerosas sustancias que forman parte del mecanismo de activación de las fuerzas curativas de nuestro organismo. De su equilibrio depende nuestra capacidad de defensa frente a infecciones.

En Biosalud Day Hospital os proponemos una combinación de nutrientes clave y que pueden fallar en este momento por diferentes factores: la falta de sol, una alimentación poco equilibrada o la propia metabolización de nutrientes.

Este Pack Prevención que puedes adquirir en la tienda online de Nutridelia refuerza el sistema inmunitario y debemos tener en cuenta que:

• No sustituye un tratamiento prescrito por el médico.
• Ante síntomas de covid-19 y otras infecciones siempre debe consultar a un especialista.
• La pauta de estos complementos nutricionales está diseñada para aportar dosis seguras y eficaces de todos sus componentes.

Los principios activos de un «cóctel» de prevención

Vitamina D y sistema inmunitario. Las células T forman parte del sistema inmunitario, son las defensas del organismo y reaccionan ante las infecciones víricas y bacterianas. Numerosos estudios han demostrado cómo la vitamina D activa estas células, les aportan capacidad de actuar.

Para mantener un nivel adecuado de vitamina D es recomendable la ingesta de huevos, lácteos y pescado azul y, si es necesario, suplementos vitamínicos. Además, la maduración de esta vitamina requiere de la acción de los rayos ultravioletas para activarse. Especialmente estos días de confinamiento nuestra fuente de luz directa ha sido la luz eléctrica y deberíamos aprovechar las horas de paseo para recibir esos rayos durante al menos, veinte minutos.

Quercitina. Esta sustancia es el flavonoide más habitual en la dieta humana. Contribuye a la estabilización de la respuesta inmune y reduce la inflamación. Se ha demostrado que es un antiviral y que podría detener la formación de la tormenta de citoquinas, una de las consecuencias del covid- 19 (Khaerunnisa et al. 2020)

El Zinc es el segundo oligoelemento más presente en nuestro organismo, entre 2 y 4 gramos, y forma parte de la estructura de numerosas proteínas. Entre otras propiedades, actúa reforzando nuestro sistema inmunitario por lo que es imprescindible cuando nuestro cuerpo tiene que luchar ante una infección.

Las proteínas animales son una gran fuente de zinc pero si se combina con una dieta muy rica en fibra, puede ser que el cuerpo no lo asimile. Por otra parte, puede haber un déficit de zinc en aquellas personas que siguen una dieta pobre en proteínas animales. En cualquier caso, los suplementos nos permiten mantener un nivel adecuado.

Vitamina C. Sus efectos beneficiosos para el sistema inmune se deben especialmente, a que estimula un tipo de linfocito, las células Natural Killer que destruyen las células infectadas y las células cancerosas.

Además de acumularse en las células inmunitarias, interviene en la proliferación de los linfocitos T y B, con capacidad para sintenizar anticuerpos.

La deficiencia de vitamina C se relaciona con una mayor susceptibilidad a padecer infecciones. Esta vitamina actúa en un primer nivel de defensas y puede encontrarse en la alimentación del día a día en las naranjas, las fresas, el pimiento rojo o el brócoli y son muy comunes los suplementos.

Artemisia. Esta es una planta inmunoreguladora que refuerza las defensas en las dosis recomendadas.

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