El israelí Avi Schroeder utiliza nano-robots inyectables programables para luchar contra la metástasis del cáncer. Se trata de robots de apenas 1 milímetro que usan la tecnología del sistema micro-eléctrico mecánico (MEMS) y se mueven a una velocidad de 9 milímetros por segundo en el torrente sanguíneo.
Estos robots emplean campos magnéticos y el flujo de sangre; no pueden acceder a todos los vasos sanguíneos y los investigadores están intentando incluir microcámaras en su interior.
Schoreder considera que es vital luchar contra la metástasis, puesto que el 90 por ciento de muertes resultan de la siembra de tumores por el tumor original en otros órganos y tejidos. Mediante el uso de estos robots y de liposamas, la quimioterapia se inserta mejor en las células.
Los liposomas tienen una habilidad natural para apuntar al cáncer, ya que la pared endotelial de todos los vasos sanguíneos humanos sanos están encapsulados por células endoteliales que están entrelazadas por uniones estrechas que previenen que cualquier partícula grande de la sangre se escape. Pero los liposomas de nanotamaño pueden rápidamente entrar a los sitios del tumor desde la sangre y son mantenidos en el torrente por la pared endotelia
Autora: Judy Siegel-Itzkovich
Fuente: www.jpost.com